Microhistorias para ahuyentar mi Covid 1
Ayer tuve
miedo mientras vi caer un meteorito y me sentí tan solo como el primer hombre
sobre la faz de la tierra. Comprendí que toda esa lluvia de estrellas no eran
señal de compañía, sino de un abandono progresivo del universo que se había
formado frente a mis ojos. La noche volvió a su oscuridad habitual y tuve que
inventarme una oración para sentir que en este mundo había cabida para otra
soledad como la mía.